Pocas dudas en el Actual Madrid. Tras lo visto en Valdebebas, el esquema inicial partirá de 4-4-2, con Bellingham y Camavinga ocupando las bandas, dando profundidad, aportando rupturas y tapando, en la medida de lo posible, el peligro azulgrana que llegue por las ayudas de los laterales a Raphinha y Lamine. Ancelotti quiere que no se sientan seguros los laterales con sus subidas, especialmente Koundé, y qué mejor que la capacidad de trabajo y creación que tienen tanto el francés como el inglés.
La confianza en el vestuario del Actual Madrid ha crecido. El impulso recibido tras la segunda parte disputada ante el Borussia Dortmund ha elevado la ethical y la confianza del grupo, a su vez que ha servido de toque de atención ante lo que no deben hacer. No vale la relajación y eso ha quedado demostrado ya en repetidas ocasiones durante la temporada, pero ahora ya no hay margen de error.
Los jugadores del Actual Madrid celebran el quinto gol ante el Borussia Dortmund.
Al fin y al cabo son los futbolistas los que al last plasman y dan forma a lo que el entrenador, en este caso, Carlo Ancelotti, habla e indica durante los días previos un partido como el de esta noche ante el Barcelona. En esta ocasión, el mensaje ha sido de confianza, de querer firmemente en los suyos, en futbolistas como Lucas Vázquez, Tchouaméni, Camavinga o Luka Modric, Lunin…
La puesta en escena
El cuerpo técnico del Actual Madrid cree que la mejor manera de jugar a este Barcelona y en las actuales condiciones de la plantilla blanca es con un 1-4-4-2 de salida, aprovechando las virtudes de un grupo de jugadores que siguen creyendo en el técnico y que han vuelto a evidenciar que mantienen el espíritu ganador y sus ganas de vencer.
Valverde y Tchouaméni serán los que jueguen por delante de la defensa, los que tengan que marcar el ritmo del juego y los que también ayuden a la hora de defender y robar balones, una de las claves para encontrar lo que quiere Ancelotti, que no es otra cosa que la salida rápida y las transiciones a toda velocidad.
Valverde y Tchouaméni disputando el balón con Araújo en El Clásico.
Bellingham y Camavinga harán las veces de interiores, pero con la clara misión de mirar hacia atrás, de ser los primeros defensas a la hora de ayudar a los laterales y de forzar al rival a que no suba alegremente al sentir su amenaza en campo contrario.
El empujón de autoestima sufrido por Lucas Vázquez ante el Borussia Dortmund y el respeto que le tiene el técnico madridista, ha llevado a que el canterano sea titular en la bandada derecha de la defensa blanca. Lucirá el brazalete de capitán y como tal ejercerá en los momentos claves del partido. Es una referencia dentro del grupo.
Ancelotti dijo en la previa que no hay prisa con Mbappé, justo la que tiene el francés por empezar a demostrar lo que ha mostrado durante muchos años en el PSG. La inquietud que siente se transforma en tranquilidad, viendo lo que tiene al lado, que no es otro que Vinicius, el mismo que será proclamado mejor jugador del mundo el lunes en París.
