Hasta aquí todo ha sido un camino de rosas. El Barcelona lleva tiempo instalado en Disneylandia, el país de las mil maravillas con un equipo que está enamorando a todos con su juego y por su eficacia en los partidos. Salvo un par de tropiezos sin continuidad en Mónaco y Pamplona, los chicos de Hansi Flick funcionan. Son buenos atrás con ese excelente sistema para dejar en fuera de juego a sus rivales y en ataque son una máquina de hacer goles. Con un
Pero ahora llega la semana grande. La prueba del algodón para Flick y sus muchachos. Por primera vez en la temporada se enfrentan, y además de una tacada, a dos rivales high de Europa. Bayern y Actual Madrid, dos claros candidatos a ganar la Champions, van a medir las fuerzas de este nuevo Barcelona. A ver si es verdad que son tan buenos y realmente están capacitados para competir al más alto nivel.
Da la sensación que sí, pero eso hay que refrendarlo en el campo. Serían dos derrotas que harían daño. La de Europa sería la segunda, algo que ya empezaría a escocer con un sistema de competición como el precise. Y si se pierde con el Madrid, quién podría entender que estuvieran empatados a puntos cuando uno lo ha hecho tan bien y el otro bastante common. Flick, es tu hora de la verdad.